El viernes pudimos poner broche final al proyecto de los alimentos.
No lo
hicimos en nuestra clase, no, no, no...
Teníamos una reserva en el
restaurante de la Sonrisa y nos convertimos todos en cocineros.
Comenzamos clasificando las frutas que habíamos traído, contando las que teníamos, haciendo sustracciones y adicciones según si quitábamos o poníamos más frutas.
Comenzamos clasificando las frutas que habíamos traído, contando las que teníamos, haciendo sustracciones y adicciones según si quitábamos o poníamos más frutas.
Después intentamos leer los nombres y escribirlos.
Una vez clasificados los alimentos buscamos las letras que necesitábamos para ponerle el nombre a nuestro gorro de cocinero.
Después del desayuno probamos todas las frutas y jugamos al juego de los sentidos, teníamos que adivinar qué fruta era con el tacto o el gusto...
Una vez clasificados los alimentos buscamos las letras que necesitábamos para ponerle el nombre a nuestro gorro de cocinero.
Después del desayuno probamos todas las frutas y jugamos al juego de los sentidos, teníamos que adivinar qué fruta era con el tacto o el gusto...
¡¡¡¡Nos encantó y nos reímos mucho con las caras que pusimos probando el
limón!!!!
Hicimos unas brochetas de frutas siguiendo un patrón y claro está nos la comimos.
Hicimos unas brochetas de frutas siguiendo un patrón y claro está nos la comimos.
Y por último decoramos nuestro delantal, ya
estábamos preparados para bailar la canción de la fruta.
¡¡¡¡Fue un día muy
especial!!!!
¡¡¡¡Espero que hayan disfrutado tanto como yo preparándola!!!!
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