Halloween es una fiesta de la cultura anglosajona que se celebra en la noche del 31 de Octubre. Sus orígenes se remontan a los Celtas, hace más de 2500 años, cuando el año Celta terminaba al final del verano, el día 31 de Octubre. Ese último día, se suponía que los espíritus podían salir de los cementerios, pedir alimentos y maldecir a los vivos. Les hacían víctimas de conjunros si no accedían a sus peticiones: me das algo o te hago alguna travesura, que es la tradución de Trick or Treat (Truco o Trato). Para evitarlo, los poblados Celtas ensuciaban las casas y las decoraban con huesos, calaveras y demás cosas desagradables, de forma que los muertos pasaran de largo asustados. La fiesta fué exportada a los Estados Unidos. La internalización de Halloween se produjo a finales de los años 70 y principios de los 80 gracias al cine y a las series de televisión. Halloween es una fiesta basada en la magia, los hechizos.. Los colores tradicionales de Halloween son el negro de la noche y el naranja de las primeras luces del día. Los símbolos de Halloween también incluyen elementos otoñales, como las calabazas y los espantapájaros.
Esta fiesta es interesante trabajarla en clase porque por un lado es divertido, toda fiesta lo es, y por otro es tradición de otros países y es necesario enseñar cultura en el aula aparte de la nuestra.
El objetivo de la celebración de esta actividad es incrementar el vocabulario, desarrollar destrezas y habilidades manuales, para la elaboración de materiales como caretas, decorados, etc e intentar quitar el miedo que muchos niños sienten por las brujas o fantasmas, en suma, pasar un día divertido y diferente.
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